La importancia del cuestionario de salud en el seguro de vida

Recientemente hemos ganado una reclamación judicial donde la aseguradora se negaba abonar al beneficiario la cantidad garantizada por la muerte de la persona asegurada, Dña. Rosario.

La aseguradora justificaba su negativa a pagar la indemnización contenida en la póliza de seguro por cuanto mantenía que, Dña. Rosario, ocultó su verdadero estado de salud, así como las enfermedades que padecía cuando contrató el seguro de vida.

Se trataba de un supuesto donde Dña. Rosario presentaba una paraplejía flácida de ambos miembros inferiores que la obligaban desplazarse en silla de ruedas consecuencia de una poliomielitis que padecía en la infancia. Y en esta situación concertó el seguro de vida ante la aseguradora.

Enel cuestionario de salud se realizaban preguntas que iban en contra de la realidad que mostraba como:

– ¿Ha tramitado o está tramitando algún tipo de invalidez o incapacidad?

– ¿Ha padecido o padece alguna enfermedad que le haya obligado a interrumpir su actividad laboral durante más de quince días consecutivos en el transcurso de los últimos cinco años o está de baja por enfermedad o accidente?

– ¿Tiene alguna alteración física o funcional, ha sufrido algún accidente grave o ha recibido transfusión de sangre?

-En conclusión ¿su estado de salud es bueno y sin enfermedad?

Las tres primeras preguntas estaban contestadas negativamente y la última, afirmativamente, lo cual se daba de bruces con la realidad que suponía que Dña. Rosario fuera en silla de ruedas. ¿Cómo puede afirmar una persona que va en silla de ruedas que no tiene ningún tipo de invalidez, que no tiene ninguna alteración física o que su estado de salud es bueno y sin enfermedad?

Sin embargo, dicha situación física era evidente y apreciable a simple vista por lo que, las contestaciones de Dña. Rosario que se recogían en dicho formulario era evidente que no eran correctas

Al final resulta que la empleada de la entidad aseguradora no leyó a Dña. Rosario las preguntas concretas indicándole solamente que firmara al pie del cuestionario de salud.

Y es que, el cuestionario de salud, cuando se rellena por los empleados y el asegurado solo pone la firma, cuando no se leen las preguntas y no se recaba la contestación correspondiente se convierte en un mero trámite y la compañía de seguros no puede eludir su responsabilidad.